
Estamos viviendo días, semanas fuera de nuestra normalidad y con ello, nuestros hábitos han cambiado. Me gusta buscar la parte positiva, mirar todo lo que tengo y qué puedo obtener de ello. Si este pensamiento lo extrapolamos a la cocina, nuestra creatividad aumenta.
Me siento en un constante reto en el que intento aprovechar todos los alimentos que tengo a mi alcance. Estoy descubriendo nuevos platos y combinaciones que dan lugar a sabores diferentes.

El fin de semana, que es cuando tengo más tiempo, aprovecho para hacer algún guiso especial. Os confieso que mi debilidad como comensal son los arroces y que poco a poco voy cogiéndoles el gustillo como cocinera. Esta vez, quise cambiar el arroz por fideos y resultó un plato muy curioso y rico que os comparto a continuación.
Ingredientes
Necesitaremos los siguientes ingredientes:
- 2 ajos
- 2 zanahorias
- 1 cebolla
- Judías verdes
- Fideos
- Caldo de verduras
- Aceite de oliva
Paso a paso

Por un lado, arreglamos las judías verdes. Yo quito las puntas, y hago dos cortes horizontales para dividirlas en trocitos más pequeños y uno más en vertical para estrecharlas. De forma que quede como la imagen que muestro encima de este párrafo.
En una cazuela las ponemos a cocer hasta que pierdan su dureza. Una vez el agua rompa a hervir las dejaremos en el fuego unos 10 minutos. Una vez haya pasado este tiempo, retiramos el agua y las apartamos para usarlas más adelante.


Por otro lado, cortamos pequeñito los ajos, las zanahorias y la cebolla para el sofrito. Calentamos en una sartén aceite de oliva y vamos añadiendo los ingredientes mencionados anteriormente, en el orden que indico.



Cuando veamos que esta mezcla comienza a tener un tono dorado, añadimos las judías verdes que teníamos reservadas y rehogamos unos minutos más. Por último, agregamos los fideos para sofreírlos y que tomen el sabor de lo que se cocina en la sartén.

Una vez tengamos la base de nuestro guiso hecha, sólo nos queda pendiente cocer los fideos. Para ello, incluimos el caldo de verduras y dejamos cocer hasta que la pasta quede al dente.

Estáis viviendo conmigo el proceso creativo cocinillas, ¿verdad? Yo en ese momento vi conveniente completar con un huevo hecho a la plancha como guinda para el plato, ¿con qué lo hubieses completado tú?
Esta ha sido una receta inventada y así os lo he relatado, con todo el mimo del mundo. Espero que os animéis a jugar con diferentes combinaciones y disfrutéis tanto como yo, cocinándolo y comiéndolo.
¡Qué aproveche!
Qué buenoooooo
Muchísimas gracias, Lu. No te lo voy a negar, el invento quedó muy rico.